Restauración del Edificio Rotonda Lágrima de los locales de San Roque
“La arquitectura de Rey Pedreira, como el resto de la arquitectura española, atravesó una etapa historicista tras la Guerra Civil. Pero, aun apoyándose en estilos históricos y en la arquitectura tradicional de Galicia, Rey Pedreira siguió siendo Rey Pedreira y sus obras nunca perdieron un substrato racionalista.”
Luis Walter Muñoz Fontenla
El trabajo de restauración propone una estrategia que permita una restitución del modelo original, tanto en lo formal-constructivo, como en lo tipológico. Esta actitud que pudiera parecer conservadora en sus planteamientos, por la intención de la recuperación prístina de su imagen, creemos es la más indicada como propuesta contemporánea en la búsqueda de la restitución no sólo del propio edificio, sino de la imagen urbana del contorno, un horizonte urbano que se ha deteriorado profundamente en los últimos cuarenta años. De esta manera la intención es que este edificio glorieta, referencia ordenadora del tránsito urbano, tanto peatonal como rodado, pueda volver a ser, centro y rótula alrededor de la que fijar el respeto por la memoria del transeúnte y ciudadano en esta zona fronteriza frente a la plaza de la leña de la ciudad de A Coruña.
El elemento a restaurar, al contrario del también coetáneo quiosco de la plaza de Ourense atribuido por Fernando Agrasar también a Santiago Rey Pedreira, no es un bien catalogado, ni un edificio, señalado como tal, sino que en el actual plan general, PGOM de A Coruña, de 2013, figura simplemente como viario, al igual que en la figura urbanística del PEPRI de 2015, Ciudad Vieja y Pescadería.
Este proyecto de Restauración, que basa su estrategia en reparaciones de baja intensidad compatibles con la idiosincrasia constructiva y tipológica original, tiene también por fin último, rescatar sus mejores valores para poder justificar que el edificio pueda ser finalmente considerado como bien protegible dentro del catálogo municipal y autonómico. Los valores urbanísticos y de imagen urbana, junto a la naturaleza arquitectónica, nacida tardíamente de la mano de uno de los mejores arquitectos racionalistas de la ciudad de A Coruña D. Santiago Rey Pedreira, le hacen merecedor de una catalogación formal que sirva para su protección igual que el referido quiosco de la Plaza de Ourense.
La conocida como lágrima de los locales de San Roque es un edificio singular, paradigma de lo que la arquitectura pública puede llegar a ser o significar, pues a su obvio valor como edificio que dota de espacios para su uso, suma otros mayores de armonización urbana y de importante significado de la imagen de la ciudad. Valores urbanos poco usuales en otro tipo de edilicias, que deben de ser recuperados como motor de la regeneración del paisaje envolvente. Se trata de un edificio que, obviamente como todos, es dentro, pero podríamos decir que, en este caso particular, es fundamentalmente fuera, pues se propone espacialmente como un repartidor del tránsito dinámico del flujo peatonal y de vehículos y, más allá, como una cubierta habitable para disfrute de la ciudadanía.
Una rotonda, pues, doblemente habitable, al interior y exterior, que reparte no sólo el tránsito –peatonal y rodado- sino la espacialidad urbana de su entorno en forma de belvedere, casi templete cívico, sobre la Plaza de la Leña. Una pequeña atalaya donde suceden acciones al aire libre –baile, títeres, música- que es observable y disfrutable desde todo su perímetro urbano, tanto desde la cota de calle como desde las fachadas domésticas a su alrededor. De ahí, creemos, la procedencia de su necesaria restauración como elemento conformador urbano, de mayor importancia incluso que su estricta edilicia.
Al mismo tiempo se trata de rescatar un edificio del abandono una pieza de arquitectura muy especial pues, bajo una aparente formalización historicista –creemos una lectura simplista-, propia de los depauperados tiempos de la autarquía que la propuso, se encuentra escondida y disimulada una tardía pieza de arquitectura racionalista, claramente perceptible en su meridiano y eficaz reparto de programa interior. Una rigurosa configuración radial en forma de lágrima adaptada a su complejo emplazamiento topográfico, perfectamente resuelta, como no podía ser de otra manera, al ser concebida por uno de los mejores arquitectos de Galicia en la referida y anterior etapa racionalista, D. Santiago Rey Pedreira, que a la sazón en aquellos años ocupaba el puesto de arquitecto municipal. Según la tesis del arquitecto D. Luis Walter Muñoz Fontenla:
“La arquitectura de Rey Pedreira, como el resto de la arquitectura española, atravesará una etapa historicista tras la Guerra Civil. Pero, aun apoyándose en estilos históricos y en la arquitectura tradicional de Galicia, Rey Pedreira siguió siendo Rey Pedreira y sus obras nunca perdieron un substrato racionalista.”
Sentencia que confirma fielmente este edificio que ahora aborda este proyecto de restauración. Rey Pedreira es también autor de la casi inmediata pieza maestra del mercado de San Agustín junto a la otra gran figura del racionalismo en A Coruña el arquitecto D. Antonio Tenreiro.
Proyecto: Restauración de los Locales de la Lágrima de San Roque. A Coruña
Arquitecto: Luis Gil Pita
Colaboradores: Alberto Alonso Oro-Julio Besiga, Arquitectos, Guillermo Rodríguez, Renovatio, Restauración fachadas-El Mosaísta, Restauración de pavimentos
Año: 2018-19
Emplazamiento: Calle San Roque-Plaza de la Leña, A Coruña, España
Fotografía estado original e Históricas: Archivo Municipal
Fotografías: Roi Alonso